Hoy queremos compartir la reflexión de la escritora mexicana Cristina Rivera Garza sobre “el lenguaje romántico y la violencia van de la mano “. Esta premisa lleva a la escritora a la pregunta siguiente: ¿Por qué la impunidad es mayor cuando se trata de feminicidios? Porque hay una manera de contar los feminicidios que es la narrativa del crimen pasional y que sirve para culpar a las víctimas y exonerar a los perpetradores.
La narrativa empieza siempre con frases del estilo: ”En qué andaría metida ella…”, o “Llevaba unas copas de más…”, o “No es de extrañar, por la forma de ir vestida…”. Se acaba culpando a la víctima de la agresión o violación, o en el caso extremo, de su proprio asesinato. Y lo agravante en el caso de los feminicidios es que la violencia va de la mano del lenguaje del amor romántico.
Al no saber distinguir donde empieza uno y donde termina el otro, se añaden por un lado la indiferencia social, y por el otro, la impunidad del Estado y la normalización de una cierta violencia “aceptada” contra las mujeres.
Al final, todos estos elementos contribuyen a que los feminicidios existan y desgraciadamente sigan aumentando.